martes, 30 de octubre de 2012

Otro sueño



Un niño adoptado en una familia aparentemente normal, con sus cotidianidades habituales, pero excesivamente protegido por ser el único hijo de la familia.

Al llegar a la adolescencia este mismo chico llega a su casa con una amiga, la cual presenta a sus padres; pero al llegar la noche y sentarse a cenar con ellos comienza a hablar de su amiga, sorprendiendo a sus padres, los cuales le recuerdan, seriamente, que está bien que tenga imaginación, pero que recuerde que no era más que una amiga imaginaria, que no le han presentado a nadie físicamente.

Él chico queda seriamente desconcertado, ¿puede su mente haberle jugado esta mala pasada?, pero no quiere seguir insistiendo y que lo tomen por loco. Sin embargo día a día sigue quedando con esta chica, hasta que un día conoce a sus padres, llegados a este punto el chico está seguro de lo que está viendo, confía en que si sus padres conocen a la familia entera lo creerán. 

El adolescente llega a su casa con la chica y su familia, los padres de él le miran desconcertados cuando les presenta a unas sombras, cuando no ven a nadie más que a su propio hijo, le intentan hacer ver que ahí no hay nadie, que es sólo un producto de su mente.

El niño comienza a asumir que realmente tiene problemas, que debería solicitar ayuda psicológica, pero no deja de pensar que todo era tan real…

En unos días aparecen los servicios sociales en su casa, procediendo a la detención de esos padres hiperprotectores que negaban la existencia de esas otras personas a su hijo para evitar que lo alejaran de su lado, provocando, ahora sí, un daño psicológico a su propio hijo, haciéndole creer que no estaba bien cuando sí lo estaba.

El chico comienza una relación con la chica, y pasa a ser cuidado por su familia, el padre de la cual es reverendo en una iglesia protestante, con lo cual cada día le toca ir a misa y ayudar a sus nuevos tutores.

lunes, 22 de octubre de 2012

Cambios y oportunidades



Todo pasa por algo. Los cambios son difíciles, tememos a la incertidumbre de lo desconocido, los nervios a dejarse llevar por nuevas situaciones, pero también son importantes esos cambios, hay que saber adaptarse a ellos, aprovechar las oportunidades que nos van surgiendo por el camino y disfrutarlas.

Esos cambios nos ofrecen nuevas vivencias, nuevas experiencias enriquecedoras, nuevas personas que se cruzan en nuestra vida sin saber que sitio acabarán ocupando; unos simplemente pasarán de largo, otros pasarán a ser simples conocidos, pero otros pasarán a formar parte de ese círculo especial que todos tenemos. Sólo el tiempo lo determinará, pero sea como sea son oportunidades para demostrarnos que estamos vivos, y que aún nos queda mucho por disfrutar.


viernes, 5 de octubre de 2012

Roma será mi Venecia



Venecia, la ciudad decadente, la ciudad que día a día y año tras año se va deteriorando. 

Se dice que Venecia se está muriendo día tras día, y que ese aire trágico se traslada lentamente, sin que nadie se percate, a sus ciudadanos e incluso a sus visitantes.

Sin embargo algo decadente también puede ser hermoso cuando nuestra vida está llena de felicidad y amor. A sensu contrario, un lugar hermoso puede resultarnos enormemente melancólico en la situación contraria.

Roma será mi Venecia sí, la ciudad eterna tendrá ese aire trágico, ese recuerdo melancólico que para mí siempre acompañará al nombre de esa ciudad. 

Pero son los recuerdos los que nos acompañan, cada lugar es distinto para cada persona, pues cada lugar que visitamos se guarda en nuestras memorias con nuestras propias vivencias y sentimientos.